EL ADOLESCENTE ES UN SUJETO EN FORMACIÓN.
PARA PENSAR ESTE PUNTO NO DEBEMOS PERDER DE VISTA:
· Desarrollo físico.
· Desarrollo sexual.
· Cambios en el esquema corporal y en la imagen corporal.
· Relaciones ambivalentes respecto al propio cuerpo: cuidado/abandono; objeto de culto/objeto de castigo, etc.
· Cómo se han encarnado las funciones materna y paterna.
· Modalidades vinculares en la familia: cómo se distribuye el poder, relaciones intrafamiliares, dependencia/autonomía.
· Portadora de valores, exigencias, expectativas, prejuicios, presiones.
· Marcada por la inmediatez y la búsqueda de placer: que lleva a una NO TOLERANCIA A
· Hiperindividualismo: “sálvese quien pueda”; “primero yo y después veremos”; competencia salvaje.
· Gran peso sobre el presente, y cierto pesimismo en torno al futuro.
· Cultura digital: abre a un nuevo mundo
LOS ADOLESCENTES DE HOY
· Cuentan con nuevas identificaciones fuera del ámbito familiar.
· Sus figuras parentales han sufrido una rotunda caída. Ponen en cuestionamiento toda figura de autoridad. Sin embargo, necesitan de los ADULTOS que ofrezcan normas claras, explícitas, algunas flexibles y negociables.
· Están en plena construcción de su identidad sexual.
· Se debaten entre la dependencia y la autonomía.
· Son en general sedentarios, con un lenguaje pobre, acostumbrados al zapping, anti – esfuerzo, críticos…
PENSEMOS POR OTRO LADO, LAS EXIGENCIAS Y VALORES QUE OFRECE EL DEPORTE
· ESFUERZO. SUPERACIÓN. DESAFÍO.
· FUENTE DE AUTOESTIMA.
· TIEMPO. PAUSA, ESPERA. TOLERANCIA A
· DESARROLLO DE
· PLACER. DIVERSIÓN. PORQUE “HAGO LO QUE ME GUSTA”
· SOLIDARIDAD. COMPAÑERISMO.
QUIENES TRABAJAN EN DIVISIONES INFERIORES (ESPECIALIDAD) DEBER TENER UN PERFIL DETERMINADO PORQUE HACEN DOCENCIA, EDUCAN, FORMAN AL JUGADOR: PRIMERO COMO PERSONA Y LUEGO COMO DEPORTISTA.